Lo primero que hay que tener en cuenta es que las jaulas de nuestros pájaros tienen que tener un tamaño adecuado en proporción con su tamaño. Esto es algo muy importante. Es necesario que una vez dentro de la jaula, nuestras mascotas tengan el espacio suficiente para poder ejercitarse, una zona en la que ellos se sientan seguros, otra de alimentación y baño, y por último una zona de juegos.
Respecto a las diversas formas que tiene las jaulas tenemos que darnos cuenta de que estas jaulas son para el bienestar de nuestro pájaro y no para decorar nuestras casas. Por ejemplo, las jaulas cilíndricas estrechas o esos otros modelos que se venden con formas irregulares, resultan muy decorativas, pero no son muy recomendables para nuestra mascota. Deben tener el suficiente espacio para permitirle girar alrededor de la jaula, y extender y levantar sus alas sin chocar con el techo o los laterales.
Teniendo esto en cuenta, las jaulas rectangulares grandes y horizontales proporcionarán mayor espacio útil que las jaulas rectangulares o cilíndricas verticales. Estas jaulas sólo permiten al pájaro escalar, pero les resultará muy difícil poder volar en ellas.
Por último, ¿cuál sería el mejor sitio de la casa para colocar sus jaulas? Pues bien, es muy recomendable que los pájaros tengan algún lugar en el que refugiarse. Por este motivo, es mejor que la jaula esté situada en alguna esquina o detrás de algún mueble, de forma que esté parcialmente cubierta para que el animal se sienta protegido en algún lugar de su jaula. Se pueden utilizar perchas para que se pueda situar en esa zona de protección o bien colocar cajas o barreras dentro de la jaula en las que se pueda esconder.