Así es el lenguaje corporal de los conejos

Los conejos, como todo animal, tienen su propio lenguaje corporal a través del que indican cómo se sienten. Son gestos con los que expresan satisfacción, felicidad, miedo o enfado, entre otras emociones y sentimientos. Si tienes un conejo como mascota, aquí te contamos las claves de su lenguaje corporal.

Miedo

El conejo expresa el miedo a través de la respiración, que es más acelerada, y de las orejas, que aprieta contra la cabeza. Además, se observa que sus ojos son más saltones y que tensa la cara.

Enfado

Para saber si el conejo está enfadado, hay que fijarse en sus patas. De esta manera, cuando patea el suelo con una pata trasera es que no está de buen humor. También muestra su enfado cuando intenta morder o emite algún gruñido.

Ganas de caricias

Al conejo, como a cualquier otra mascota, no siempre le gusta que le acaricien. Y, ¿cómo saber si es el momento adecuado? Es sencillo: el conejo se aproximará y agachará las orejas. Por el contrario, si le aleja de ti o bien te da la espalda, es que no quiere ser molestado ni siquiera para recibir mimos.

Gestos de dolor

Cuando el conejo siente dolor, lo que hace es emitir un sonido alto, como si estuviera gritando, que llega a resultar un tanto estresante para las personas. Esto puede deberse tanto a que se ha hecho daño y tiene alguna herida como a molestias originadas por alguna enfermedad.

Felicidad

El conejo expresa su felicidad a través de gestos tan sencillos como saltar y dejarse caer de golpe sobre el suelo, girar la cabeza… Igualmente, manifiesta este sentimiento corriendo por la casa, girando las patas y levantando las orejas para moverlas hacia adelante. El movimiento de la cola es otra clara señal.

Tranquilo

Si observas que el conejo está tumbado sobre su panza y tiene las patas traseras estiradas, lo que te quiere decir es que está muy tranquilo. Su nivel de relajación también se expresa cuando esconde las patas bajo él y las orejas caen hacia atrás.