El CBD, también conocido como cannabidiol, se ha convertido en un compuesto presente en la planta de cáñamo que utilizan millones de personas en todo el mundo por los beneficios que aporta. Por ello no es de extrañar que ahora también se utilice para ayudar a perros, gatos, conejos o caballos.
Se puede afirmar que esta sustancia no psicoactiva o psicotrópica es segura, natural y no causa efectos secundarios. Eso, sumado a que sus efectos positivos también pueden ayudar a los animales, ha abierto la puerta al uso de CBD en mascotas con resultados sorprendentes.
El CBD para perros es muy recomendable porque influye en su bienestar mejorando su calidad de vida por varias razones.
CBD para la ansiedad
Como bien sabrás, no son pocos los perros que por desgracia sufren ansiedad y no siempre es fácil reconocer los síntomas. El uso del CBD es muy habitual en personas con ansiedad porque ayuda a controlarla sin necesidad de recurrir a medicamentos, y eso es justo lo que también ocurre cuando se utiliza en perros. La mayoría de los veterinarios sostiene que es eficaz para controlar el estrés, algo que puede ser especialmente útil en determinados días como cuando hay fuegos artificiales. Basta con utilizar aceite de CBD para que se sientan mejor. Y eso mismo también sucede con la ansiedad crónica.
CBD para las convulsiones
El problema de las convulsiones también es bastante conocido en perros y el CBD una vez más se muestra como muy eficaz. Un estudio veterinario llevado a cabo en 2019 lo corrobora, puesto que se apreció una reducción del 89% en la frecuencia de las convulsiones en aquellos perros que, ya inmersos en una terapia con medicamentos antiepilépticos, probaron el CBD.
Siguiendo esta misma línea, se está trabajando para crear una versión canina del Epidiolex, un medicamento que cuenta con la aprobación por parte de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos y que se utiliza con éxito para tratar las convulsiones en personas.
CBD para la osteoporosis
La osteoporosis canina es otro problema muy común que afecta a los huesos y que se puede aliviar gracias al uso de CBD. Una investigación estima que aproximadamente uno de cada cinco perros mayores de un año lo padecen, y se ha demostrado que es posible mejorar su calidad de vida gracias a grandes dosis de CBD, ya que sus propiedades antiinflamatorias actúan de forma positiva en su movilidad.
Cómo administrar CBD a un perro
Lo más habitual es que tanto los extractos como los aceites de CBD sean administrados por vía oral. Eso significa que hay que utilizar el cuentagotas que suele llevar el envase para colocarlo cerca de la boca del perro. Cuando no es posible porque se resiste, lo que se puede hacer es colocarlo en la comida o en el agua.
Para combatir una dolencia grave y obtener resultados rápidos, lo ideal es que el CBD se utilice bajo la lengua, colocándose en la misma posición que el perro e insertando la jeringuilla en el lado de laboca.
Cuando se trata de saber qué cantidad de CBD hay que administrar a los perros, lo ideal es consultar las cantidades recomendadas por el fabricante, además de preguntar a un profesional que esté familiarizado con este compuesto y con un veterinario.