Cuando Janelle DeRouen, de New Iberia, escuchó no hace mucho tiempo hablar de Chanel (el que supuestamente era el perro más viejo del mundo con 21 años de edad) supo que tenía que poner las cosas claras y explicar que Chanel no es el perro más viejo del mundo. Ella podía probar esa afirmación; Janelle es la “mamá” de Max, un perro mestizo con antepasados terrier que celebró su 26 cumpleaños el pasado 9 de agosto.
Después de ponerse en contacto con Guinness World Records y explicar y aportar los datos necesarios sobre Max, el perrito se convirtió automáticamente en el ganador del récord mundial. Calculando su edad humana, el perro tiene un total de 182 años, aunque sólo diciendo su edad perruna es algo increíble que muchos se preguntan como es posible.
El día de su 26 cumpleaños lo celebró en su casa, rodeado de su familia y algunos de sus amigos perrunos. Recibió diferentes regalos entre los que se encontraba el regalo de sus “padres”: un nuevo sofá-cama donde poder descansar bastante mejor.
Nació en 1983, y por el momento no ha tenido demasiados problemas de salud. Ahora está comenzando a tener los achaques propios de su edad; empieza a tener cataratas y un poco de artritis, pero por lo demás está en perfecto estado de salud. Según ha comentado su dueña, la única vez que ha tenido que llevarle al veterinario de urgencia fue cuando tuvo un problema con un diente que finalmente tuvieron que extraerle.