Adoptar un perro requiere una serie de trámites legales en nuestro país, no es tan fácil como llegar a un centro de acogida y llevarte en el momento el que más te guste. La adopción es un acto que implica un compromiso, una responsabilidad destinada a darle una mejor vida a un perro y con la que las autoridades pertinentes se cubren las espaldas ante un futuro abandono gracias a los microchips.
Algunos de los trámites más importantes serán registrar el perro en el ayuntamiento, contratar un seguro o ponerle un microchip para poder localizarte en caso de que se pierda, escape o incluso si lo abandonas. Cada comunidad autónoma tiene sus normas, pero hay muchos trámites que son comunes en todas ellas, así que pasemos a verlos con detalle a continuación:
Ponerle un microchip
Es un trámite obligatorio en nuestro país, y se trata de la colocación de este pequeño dispositivo electrónico en el perro y en el que figuran todos tus datos para poder localizarte llegado el momento. La identificación quedará registrada en la cartilla de vacunación y es obligatorio tanto para perros como para gatos.
Registro en el ayuntamiento
No es obligatorio en todo el país pero sí en gran parte, y sí lo es en el caso de que sea de una raza de las consideradas potencialmente peligrosas. Lo más recomendable es que te informes en tu ayuntamiento para saber si en tu caso es obligatorio o no.
Seguros
El seguro para perros es obligatorio solo en el caso de los potencialmente peligrosos, y para el resto solo es obligatorio en las comunidades de Madrid y País Vasco. Las pólizas pueden incluir diferentes prestaciones, siendo la más barata desde 50 euros anuales y la más cara unos 300.
Perros peligrosos
Si el perro que vas a adoptar es de los considerados potencialmente peligrosos, además de todo lo anterior deberás también superar un curso de formación sobre lo que implica tener este tipo de razas, durante el cual se valorarán también tus capacidades físicas y cognitivas.