Si el otro día hablábamos de las razas que están consideradas comos potencialmente peligrosas, hoy vamos a centrarnos en las condiciones que tienen que reunir los dueños para poder tener un animal de una de las razas que forman parte de este listado. Y es que esto es especialmente importante porque se ha observado que, en muchos de los ataques que han aparecido en las noticias, los perros no estaban en las condiciones legales necesarias ni se habían establecido las medidas de seguridad precisas.
Los requisitos
Lo primero que una persona necesita para vivir con un perro considerado potencialmente peligroso es la licencia para tener este tipo de animales en casa.
Además, se deben cumplir una serie de requisitos adicionales, que básicamente se resumen en cinco. Dentro de ellos, figura, ser mayor de edad, aparte de no haber sido condenado por delitos de homicidio ni lesiones, torturas o bien por casos que van contra la libertad o contra la integridad moral, libertad sexual y la salud pública.
Tampoco se debe haber sido condenado por asociación con banda armada o narcotráfico ni se puede estar privado del derecho de tener animales potencialmente peligrosos por resolución judicial.
Otro de los requisitos se basa en no haber sido sancionado por infracciones graves o muy graves con alguna de las sanciones estipuladas en el régimen jurídico relativo a los animales potencialmente peligrosos.
Además, se tiene que disponer de capacidad física y aptitud psicológica para la tenencia de estos animales y estar en condiciones de acreditar la formalización de un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros con una cobertura no inferior a 120.000 euros.
Otras medidas
Además de la correspondiente licencia y de que el dueño cumpla estos requisitos, es necesario adoptar una serie de medidas de seguridad que pasan, principalmente, por que estos perros lleven obligatoriamente bozal, aparte de estar controlados con cadena o correa no extensiva de menos de dos metros. Un dato importante es que no se pueden llevar más de uno de estos perros por persona.
En aquellos casos en los que estos perros vayan a estar en fincas, casas de campo, chalets, parcelas, terrazas o patios, entre otros lugares, tendrán que estar atados, siempre que no se disponga de habitáculo con la superficie, altura y cerramiento adecuado para proteger a las personas o animales que se acerquen a estos lugares.
Los perros de las razas potencialmente peligrosas tienen que estar siempre identificados con un microchip y, si se pierden, se tiene que comunicar su pérdida al responsable del Registro Municipal de animales potencialmente peligrosos en un plazo máximo de 48 horas desde el momento de su pérdida.
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