Ayer hablábamos de la relación entre los gatos y el agua, explicando que los mininos no siempre se llevan mal. No obstante, es una asociación que se remonta a los orígenes de cada raza de mininos. Y esto, precisamente, hace que haya algunos gatos que adoran el agua y les encanta estar en contacto con ella. ¿Cuáles son? Aquí te contamos las principales por si te decantas por este tipo de mascotas.
Las razas
Una de las razas de gato a las que más les gusta el agua es la conocida como Maine coon. Unos gatos que se caracterizan por su gran cuerpo, que es fuerte y robusto, además de peludo, y que parecen casi pequeños tigres. Es una mascota que está muy acostumbrada a vivir en condiciones difíciles, teniendo una gran capacidad de adaptación.
El gato Bosque de Noruega es otro de los mininos que, inicialmente, no tiene problemas con el agua. Este minino convive a la perfección con el agua porque es una raza originaria y que ha crecido durante años en las zonas de grandes lagos y ríos. Y esto es lo que explica esa cercanía con el agua.
Esto hace que no tengan miedo ni presenten ningún temor al agua. Es más, no habrá problema en un principio en bañarlo. Incluso, si tiene agua cerca, puede que él mismo se dé un buen chapuzón sin necesidad de incitarle a ello.
A estas dos razas de gatos se suman otras, que también disfrutan estando en el agua. De esta manera, tenemos que hablar del Van turco, así como del Savannah y del Manx. Todas ellas son amantes del agua, sobre todo, para jugar y chapotear en ella en cuanto la ven o bien detectan aunque sea un charco.
Y no les gusta el agua solo para el juego, sino también para bañarse. Son mascotas que suelen estar encantadas en disfrutar de una buena sesión de aseo o en meterse en la bañera, aunque no tengan necesidad de lavarse.
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