De vez en cuando un perro puede cojear. En general, son situaciones normales que se pasan en poco tiempo porque se deben a un pequeño golpe, una caída o bien un mal apoyo. Sin embargo, no siempre es así. También hay otros motivos que explican que el perro cojee. Es el caso de algunas enfermedades que se manifiestan a través de la cojera, siendo uno de sus síntomas más frecuentes. Hoy vamos a hablar de las principales causas que hacen que el can no pueda andar.
Causas más comunes
Cuando el perro cojea puede deberse principalmente a varias causas menores como, por ejemplo, se ha dado un golpe sin querer, ha hecho un mal apoyo o bien se ha caído y se ha hecho daño en alguna de las patas. En estos casos, es habitual que se produzca alguna contusión o bien una fractura ósea, aunque también puede deberse a la rotura de ligamentos.
Estos casos se engloban en la llamada cojera aguda porque suelen tener su origen en un traumatismo, generando problemas leves o bien ya un poco más graves como la rotura de un hueso o el ligamento.
Enfermedades
Dentro de los motivos que explican la cojera en el perro también se encuentran la artrosis, la displasia de cadera o de codo. Normalmente, esto se debe a que se produce una degeneración en la articulación por el desgaste del cartílago o bien por la existencia de una malformación.
Estas causas se engloban en la cojera crónica porque tiene más larga duración y ya se deben a enfermedades como la artrosis o displasia que, en general, no se curan y acompañan al perro de por vida. No obstante, esto puede variar en función del perro y del estado de la patología.
Veterinario
Sea cual sea la causa que creamos que origina la cojera, es importante vigilar al perro. Y es que si sigue cojeando durante todo el día o bien se nota que tiene dolor o una gran dificultad para moverse es conveniente acudir al veterinario lo antes posible.
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