Hay ocasiones en las que las alergias de los perros no pueden prevenirse como sucede con las alimentarias. Sin embargo, en algunos casos, es importante tomar una serie de medidas y de precauciones para evitarlas como sucede, por ejemplo, con todas aquellas que están relacionadas con los problemas en la piel o las dermatitis o las que les pueden causar problemas en las vías respiratorias por estar en entornos que no son adecuados para ellos. Con unos consejos muy fáciles y sencillos, se consigue que el perro esté libre, al menos, de algunas alergias que sí pueden evitarse.
Alérgenos
En el caso de aquellas alergias que están producidas por la presencia de ectoparásitos, como pueden ser las pulgas y las garrapatas, es importante la prevención para que no se desarrollen este tipo de alergias y sus consecuencias.
De esta manera, es clave mantener alejado al perro lo máximo posible de estos parásitos y de los focos en los que pueden estar, aunque no siempre es fácil como sucede con los parques públicos.
Por supuesto, el perro debe revisarse periódicamente para que, en caso de que los tengan, detectarlo lo antes posible. En esta revisión, hay que poner especial énfasis en observar su pelo, que es donde suelen quedar atrapadas. Además, es conveniente seguir los tratamientos de desparasitación que recomiende el veterinario.
También es clave, pero igualmente vital, desinfectar lugares como jardines si se tienen en casa, así como la casita del perro y de todos sus enseres porque son sitios en los que es habitual que se alojen también estos parásitos para protegerse y no ser eliminados.
La limpieza es igualmente clave para que no se vean afectados, por ejemplo, por alergias relacionadas con el polvo o con la presencia de ácaros u otros agentes o alérgenos que estén en el ambiente y que pueden causarle problemas en las vías respiratorias.
Alimentación
Las alergias relacionadas con los alimentos son más difíciles de evitar porque nunca se sabe cuando el perro va a desarrollar esa sensibilidad o si ya ha nacido con ella. Y es que puede aparecer en cualquier momento, aunque el perro no haya sido alérgico anteriormente.
Sin embargo, sí es importante prestar atención a cómo le sientan algunos alimentos que son los más frecuentes en este tipo de alergias. Entre ellos, están la carne de vacuno y la de pollo, así como la soja y maíz y el trigo.
En el caso de detectar algún problema, no queda más remedio que retirar estos alimentos y que el pero siga otra dieta que debe recomendar y pautar un veterinario para que ingiera todos los nutrientes que necesita para su desarrollo y la actividad diaria.