Las chinchillas, son unas simpáticas mascotas que pueden llegar a vivir unos 15 años, aunque no es de extrañar que puedan llegar a vivir entre 18 y 22. La longitud de su cuerpo es de cerca de unas 10-14 pulgadas, la cola mide unas 6.5 pulgadas o menos. Con un manejo suave desde una temprana edad la mayoría de las chinchillas se convertirá en mascotas muy mansas y muy participativas con sus dueños, aunque a veces no les guste demasiado ser abrazadas.
Son muy activos y juguetonas. Las chinchillas se pueden mantener por separado, aunque si se quiere juntarlas con otras del mismo sexo no tiene por qué haber ningún problema, sobre todo si son hermanas o se les junta a una temprana edad. Las chinchillas son principalmente animales nocturnos, así que su actividad aumentará durante la noche. Sus picos de actividad se suelen dar entre al amanecer y luego al atardecer. En cualquier caso, deben mantenerse en una zona bastante tranquila durante el día.
Prefieren una rutina constante en sus hábitos, ya que si se les producen cambios continuos, se pueden estresar fácilmente. Ya que son tan activas y juguetonas, las chinchillas necesitan una jaula espaciosa para hacer ejercicio, así como para jugar. Las temperaturas demasiado elevadas deben controlarse ya que no son amigas del calor y hay que tener cuidado.
Respecto a su alimentación, las chinchillas requieren una gran cantidad de fibra y que su dieta este, sobre todo, compuesta de heno de buena calidad, junto con las bolitas especiales de comida que existen ara ellas. Este tipo de comida, debe utilizarse con moderación. El sistema digestivo de las chinchillas es bastante sensible por lo que cualquier cambio en la dieta debe ser gradual.