Lo normal es que no ocurra pero, ¿sabes qué pasaría si tu perro mordiera a alguien? Como sabes, los actos de un perro y sus consecuencias son responsabilidad de su dueño, aunque existen atenuantes y excepciones al respecto.
En realidad, el Código Civil español especifica la responsabilidad que atañe a la tenencia de animales: “El poseedor de un animal, o el que se sirve de él, es responsable de los perjuicios que causare, aunque se le escape o extravíe”.
Seguros
Para casos como el que te acabamos de comentar, son útiles las compañías aseguradoras de los perros, que se hacen cargo de las posibles indemnizaciones de los perjuicios que pudiera causar el animal. Para ello, el agredido tendrá que acreditar que las lesiones físicas o los daños morales han sido consecuencia del ataque del animal, a través de informes médicos y psicológicos.
Atenuantes
Tener al perro asegurado, con la cartilla de vacunación al día, identificado con microchip y llevarlo sujeto con correa por la vía pública, y con bozal, en caso de que el perro pertenezca a las razas consideradas «potencialmente» peligrosas, se convierten en circunstancias atenuantes en caso de la agresión del perro a terceros. Así, si el perro ataca a otra persona u animal se dirimirán las responsabilidades penales y el caso se tramitará por la vía civil.
Excepciones
Por otro lado, si el dueño deja en manos de una tercera persona la supervisión y cuidado de su perro, será ella quien tenga que asumir las consecuencias en caso de que el animal atacara a alguien.
Además, la ley exime de responsabilidades en caso de fuerza mayor (si el perro se escapa por una situación catastrófica o si ha sido robado), o si la culpa es de la víctima de la agresión por haber hostigado o agredido al animal.