En ocasiones, los pájaros tienen un comportamiento extraño, que se observa porque están mucho más violentos y se muestran intranquilos e, incluso, sienten una cierta apatía. El caso más extremo es cuando llegan a autolesionarse. Son situaciones que pueden deberse a diversos factores. Aquí vamos a explicar los principales y todos aquellos que influyen de forma directa o indirecta y que están detrás de ese mal comportamiento.
Factores
Uno de los principales motivos que están detrás del mal comportamiento del pájaro es una alimentación ineficiente. Y es que para que el pájaro esté totalmente bien necesita ingerir todas las vitaminas y minerales que le hacen falta. En caso contrario, se notará que el pájaro está más enfadado e, incluso, apático.
La jaula en la que vive también puede afectar a su comportamiento. Y es que puede tener la sensación de que está encerrado porque la jaula no tiene un tamaño suficiente y aceptable en la que el animal pueda sentirse cómodo.
En estos casos, siempre es conveniente dejar al pájaro un poco suelto para que se sienta libre y pueda revolotear y acampar a sus anchas. No obstante, sería conveniente plantear un cambio de jaula más adaptada a sus necesidades.
El ambiente en el que está colocada la jaula también puede influir en el comportamiento del pájaro. Y es que, por ejemplo, el exceso de frío, oscuridad, no poder ver la luz o el ruido hacen que sienta apatía y angustia, lo que le puede llevar incluso a enfermar.
Enfermedades
El mal comportamiento del pájaro también está relacionado con las enfermedades. Son casos en los que se muestra apático y más violento. Especial atención hay que prestar a cuando se autolesiona porque puede ser una señal de que tiene algún parásito externo o bien alguna afección digestiva.
Y, aunque no son enfermedades como tales, sí es cierto que en determinados momentos en la vida, el pájaro está más alterado. Sucede, por ejemplo, en la etapa de la reproducción o cuando mudan las plumas.
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