Hace unos días te hablamos sobre cómo acabar con las pulgas de los perros, un problema que crece con la llegada del verano. Sin embargo, estos no son los únicos parásitos de los que tendrás que tener cuidado, ya que hay otros muchos que pueden provocar graves consecuencias en la salud del animal. Así, es esencial desparasitar periódicamente a los canes, además de ofrecerles protección externa e interna.
Hoy en Animal Mascota queremos hablarte de los parásitos más comunes, dividiéndolos en externos e internos. ¿Te gustaría acompañarnos?
Parásitos externos
En primer lugar, queremos hablar de los parásitos externos, entre los que destacan las pulgas y las garrapatas. Podríamos considerar a las primeras como la mayor plaga de los perros, aunque no son peligrosas para los humanos. Eso sí, pueden ser muy molestas para los canes, a quienes muerde para conseguir su sangre. En cuanto a las garrapatas, son más comunes en las zonas rurales, especialmente en las ganaderas. El principal problema de estos parásitos es que, además de ser molestos para el animal, pueden transmitir enfermedades infecciosas. En nuestro artículo “Cómo acabar con las garrapatas de un perro» encontrarás consejos interesantes.
Otros parásitos que pueden provocar problemas en los perros son los piojos, las chinches, los ácaros de la sarna, el gusano barrenador y el tórsalo, aunque estos dos últimos afectan únicamente en zonas rurales de América.
Parásitos internos
Son muchos los parásitos que pueden afectar internamente al animal. Entre ellos, queremos destacar los gusanos del corazón, un problema emergente en los países de Europa del Sur y del Este. Este tipo de parásitos pueden afectar al torrente sanguíneo del organismo y provocar insuficiencia cardíaca. También queremos hablarte de los gusanos látigos, también llamados tricúridos, uno de los parásitos intestinales más frecuentes. Si no se tratan, pueden llegar a ser mortales.