Los perros no solo ladran y utilizan determinadas partes de su cuerpo como la cola o las orejas para expresarse. También recurren a los aullidos. Una forma de comunicación que, aunque no es las más frecuente, igualmente es utilizada en determinadas ocasiones. Pero, ¿qué significan los aullidos? Aquí te contamos las principales ocasiones en las que el can aúlla para que sepas qué le sucede.
Emociones y comunicación
Una de las razones por las que el perro aúlla es para mostrar su estado emocional y anímico, de manera que es una señal que permite al dueño saber cómo se encuentra. Por ejemplo, este sonido suele ser el que el can emite cuando se siente solo durante mucho rato.
También el aullido se emplea para expresar dolores o molestias -son muy continuados y tienen un tono más triste o como lastimero-, así como el estrés y la ansiedad, que se manifiestan a través de aullidos frecuentes y más prolongados.
No obstante, hay que tener en cuenta que, igualmente, son la expresión de un susto o período traumático, lo que se nota porque es un aullido que está asociado a algún aspecto concreto y que desaparece una vez se ha superado la ocasión.
Pero, además, es una forma de comunicarse y no solo con las personas, sino también con otros canes, de manera que puede ser una respuesta a otro perro que haya aullado. El aullido así tiene otras funciones como la de “llamada” para comunicarse.
De hecho, también es habitual que recurra al aullido cuando ve a toda la familia unida, en una fiesta… y que se reconoce porque tienen un tono alegre y se acompaña de excitación. A su vez es la forma de avisar de que hay un intruso, pero pierde esa alegría para ser más insistente.
Otras expresiones
El aullido puede tener otros muchos significados como el establecimiento de una marca territorial para señalar el espacio que considera suyo o bien porque imita otros sonidos que escucha como, por ejemplo, una canción de la radio que se esté oyendo en ese momento, entre otros.
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