El adiestramiento canino es un proceso que pone el foco en el refuerzo positivo de acciones, rutinas y hábitos con los que el animal se familiariza por medio de la repetición práctica. A través del adiestramiento canino, el animal aprende a seguir diferentes indicaciones y responde de manera obediente. El adiestramiento canino se aplica para alcanzar diferentes objetivos como, por ejemplo, reducir la agresividad, mejorar el vínculo con el dueño y potenciar su bienestar. Cada caso es concreto y específico, sin embargo, existe un factor esencial: la planificación. De este modo, es fundamental conocer la realidad del animal para acompañarle y guiarle en la adquisición de nuevas habilidades y destrezas.
La educación es un proceso que surge de forma natural desde el nacimiento
La educación, por el contrario, también hace referencia a un aprendizaje que prepara al animal para disfrutar de una convivencia agradable con el entorno. Sin embargo, el enfoque del proceso es diferente. Se produce de forma totalmente natural y espontánea desde el nacimiento. Y, cuando un perro llega a un hogar, y se une a una familia, continúa con su aprendizaje en la interacción con el contexto que forma parte de su realidad cotidiana.
Educación y adiestramiento canino son diferentes, pero también tienen una base en común. Influyen positivamente sobre el comportamiento del animal. Y, además, son ingredientes que se complementan en la práctica. Hay que tener en cuenta que, para evitar y prevenir conflictos en la convivencia, es importante que el animal también comprenda el significado de algunas normas. En ocasiones, surgen problemas de conducta que generan efectos negativos (y suelen agravarse cuando no se atienden ante las primeras señales).
¿Cuándo es importante consultar los servicios de un adiestrador canino?
Aunque no todos los perros necesitan superar un proceso de adiestramiento canino adaptado a sus necesidades, sí es aconsejable solicitar los servicios de un profesional cuando se produce una circunstancia que interfiere en la interacción que el animal establece con el entorno.