¿Vas a cambiarte de vivienda? Pues si tienes gatos en casa debes saber que las mudanzas pueden resultan peligrosas para ellos. Y es que, aunque no lo creas, los felinos son animales muy territoriales que crean fuertes nexos de unión con su entorno.
Para que seas consciente de que durante el traslado deberás tener mucho cuidado, hoy en Animal Mascota vamos a contarte cuales son las consecuencias que puede sufrir tu gato durante o tras una mudanza. ¿Te apetece acompañarnos? ¡Te aseguramos que esta información puede resultarte tremendamente útil!
Estrés
Como te hemos comentado al principio, los gatos crean fuerte lazos afectivos con su entorno. Por eso, no les gustan nada las mudanzas. Es más, durante los traslados estos animales pueden sufrir miedo, nerviosismo, ansiedad y estrés. Lo peor es que el estrés puede desencadenar en otros problemas como la pérdida del apetito por parte del felino o los problemas de comportamiento, en especial la agresividad. Además, notarás que el gato está estresado si no usa la caja de arena, se limpia constantemente o se esconde más de lo habitual.
Enfermedades
Por otro lado, es importante tener en cuenta que, como consecuencia del estrés, los gatos pueden llegar a padecer ciertas enfermedades. Por ejemplo, puede ocurrir que felinos que hayan pasado por una mudanza sufran dolencias en la vejiga.
Fugas
Durante las primeras semanas en tu nuevo hogar deberás tener mucho cuidado de no dejar puertas ni ventanas abiertas, ya que es posible que tu gato intente escapar para volver a su antigua casa.
Una mudanza lenta
Para que una mudanza no suponga un trauma para tu gato, lo mejor que puedes hacer es que el cambio se haga de una forma lenta. Para más información, te recomendamos que no te pierdas Animal Mascota, ya que muy pronto te daremos consejos para realizar una mudanza con gatos.