Con la llegada del mes de septiembre, muchas personas acaban sus vacaciones y tienen que volver al trabajo y a su rutina diaria. Un cambio que no siempre es llevadero, lo que hace que aparezca la llamada depresión postvacacional. Pero, ¿sucede también en las mascotas? La respuesta es afirmativa. Una vez más personas y mascotas se parecen bastante. Y, ¿qué puede hacerse para que este período sea más llevadero para los animales de compañía? Con estos consejos, podrán superar la depresión postvacacional en menos tiempo.
Las recomendaciones
Uno de los principales consejos es recuperar la rutina con normalidad y poco a poco. Es decir, que las mascotas tienen que adoptar todas las pautas habituales de forma progresiva y gradual.
Sin embargo, esto no debe confundirse con una falta de firmeza, que es clave para recuperar la normalidad del día a día. Es importante hacer comprender a la mascota la nueva situación y la importancia de seguir los buenos hábitos.
Dentro de esta vuelta a la rutina, tiene un papel muy importante la actividad física de la mascota, sobre todo, de los perros y los gatos. De esta manera, es conveniente seguir los horarios establecidos para las diversas actividades que se realizan en el día como los paseos y el tiempo de juego. Así, el regreso será mucho más llevadero y la mascota reducirá su depresión o nivel de estrés.
La alimentación, aunque siempre debe vigilarse incluso durante las vacaciones, es otra de las claves para ayudar a la mascota a superar la depresión postvacacional. Para ello, es fundamental fijar las horas más adecuadas para las comidas y las cantidades concretas.
Otras pautas
La higiene igualmente debe recuperarse con normalidad. Así, hay que bañar a la mascota con la periodicidad adecuada, además de cortar sus uñas, cuidar sus dientes…
En materia de higiene, no solo las acciones se tienen que centrar en el animal de compañía, sino también en todos aquellos objetos que haya utilizado fuera de casa para lavarlos bien y que no se introduzcan gérmenes en el hogar.
Es especialmente importante vigilar su estado para detectar posibles enfermedades. De hecho, es aconsejable llevar a la mascota al veterinario para una revisión tras las vacaciones para cerciorarse de su buen estado de salud y que no ha contraído afecciones en el ambiente en el que ha estado durante el verano.
Y, por supuesto, hay que vigilar su estado de ánimo porque, con la vuelta al trabajo, nuevamente la mascota deberá pasar sola más horas en casa. Esto puede generarle ansiedad, que puede tratarse consiguiéndose buenos resultados.
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