El podenco es una raza de perro bastante habitual en España. Es un animal que es muy conocido, sobre todo, porque se emplea en muchas ocasiones para terapia. Y, aunque dentro del podenco, hay diferentes razas y tipos, todos ellos comparten en común una serie de características que conviene conocer para saber cuándo es un can idóneo para el hogar y las atenciones que requiere.
Principales rasgos
El podenco es un perro que tiene los sentidos muy desarrollados, lo que hace que tienda a estar siempre alerta. Además, es una mascota que suele ser también bastante enérgica y vital, siendo muy resistentes a la fatiga. Un motivo por el que son habituales también en la caza.
Desde el punto de vista físico, aunque varía según el tipo de raza, se puede decir que es un can con un cuerpo estilizado, llegando a medir (teniendo en cuenta la altura a la cruz) entre 32 centímetros y 53 centímetros en función de si la talla es pequeña, mediana o grande y del sexo. El peso también varía desde los 8 a los 27 kilos.
Los rasgos físicos del podenco no solo se notan en su cuerpo. Muy distintivo es su morro alargado. Y, en cuanto a su pelo, cabe decir que es corto, con la excepción del podenco portugués.
Carácter
El podenco es un perro que se define por su carácter cariñoso, sumiso y leal con el dueño. Unas particularidades por las que es un can que es idóneo para todo tipo de familia, incluidas las que hay niños. De su carácter, destaca a su vez ser una mascota tranquila, colaboradora, intuitiva y silenciosa.
Además, es un perro que detecta rápidamente el estado de ánimo de las personas con las que convive para darles lo que necesita. Es un perro al que le gusta dar y recibir cariño.
Cuidados
A pesar de su energía y resistencia a la fatiga, el podenco es una mascota que necesita descanso. Esto facilita la convivencia en el hogar porque puede ser un perro dinámico en paseos o para la práctica de actividades deportivas conjuntas, pero muy tranquilo en casa.
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