¿Sabías que los animales esterilizados o castrados suelen mejorar mucho su comportamiento? Los gatos esterilizados enfocan su atención a sus familias humanas, sin embargo, los no esterilizados vagan normalmente en busca de una hembra en celo sin importarle los peligros que se puede encontrar por el camino. Los machos, suelen marcar su terreno orinando por diferentes zonas. Los perros, suelen centrar su nerviosismo por el olor del celo de las hembras, en los muebles de la casa.
Los perros, también, podrán dejarte en evidencia intentando montar las piernas de todos aquellos que se acerquen. No debes confundir su agresividad con el proteccionismo; un perro castrado protege su hogar y a su familia, sin embargo un perro que no esté castrado puede ser más agresivo sin darse cuenta de que la persona a la que está mostrando su agresividad es de su familia. En el caso de las hembras, te mostrarán fácilmente cuando están en celo y cuando no. Durante cuatro o cinco días, cada tres semanas, las gatas en celo maúllan constantemente e incluso pueden llegar a orinarse fuera de su caja.
Las perras también intentan atraer a los machos a grandes distancias. Estas, tienen la regla durante una semana aproximadamente, pero no te preocupes porque lo normal es que se limpien ellas mismas y no ensucien demasiado. La esterilización de la hembra (extracción de ovarios y útero) y del macho (extirpación de los testículos) son procedimientos veterinarios realizados bajo anestesia general. Ambas requieren una hospitalización mínima.
Los veterinarios recomiendan esterilizar o castrar a las mascotas tan pronto como sea posible. Además de impedir la reproducción no deseada, esterilizar a un gato o a un perro macho antes de los seis meses de edad previene el cáncer de testículos y enfermedades de la próstata. La esterilización de la hembra ayuda a prevenir la piometra (pus en el útero) y el cáncer de mama.