Si nuestra mascota tiene un problema de salud, lo primero que deberemos hacer es llevarla al veterinario para que verifique qué es lo que le ocurre y le recete el tratamiento necesario. Si queremos mejorar la salud de nuestra mascota, también podemos hacer uso de los conocimientos milenarios que la medicina tradicional china ha ido acumulando a lo largo de los siglos, tanto para nosotros, los humanos, como para nuestras mascotas. Una de las formas de que nuestras mascotas puedan beneficiarse de dicha sabiduría es a través del masaje Shen Shu.
El masaje Shen Shu se denomina así debido a un punto de acupuntura situado en la vejiga que en la medicina tradicional china se conoce como Espíritu de los Animales y se basa en fundamentos de la acupuntura.
Con este masaje, lo que se consigue es equilibrar el Qi o energía vital de los animales (equivalente al Chi en los humanos). Una vez que la energía se reequilibra se fortalece la salud del animal, se mejoran o desaparecen diferentes patologías y se aumentan sus defensas. El masaje es aplicado por el terapeuta con distintos movimientos de las manos como son barridos, rotaciones, empujes y presiones efectuadas a lo largo del cuerpo del animal, sobre todo en la denominada Zona de Especie.
Esta zona de especie suele discurrir paralela a la columna vertebral y es diferente para cada animal. Por ejemplo, mientras que en los perros se encuentra a la altura del omóplato, en los gatos esta zona está a la altura de las últimas costillas.
Con este masaje se consiguen aliviar dolores causados por artrosis, problemas de las articulaciones o musculares, así como los derivados de problemas de osteoporosis. También es útil en caso de dolores provocados por un traumatismo que haya sufrido nuestra mascota.