Aunque pueda parecernos mentira, nuestros perros pueden llegar a ser igual de envidiosos que las personas. Al igual que nosotros podemos sentir cierta envidia en situaciones concretas de nuestra vida, a estos animales les sucede lo mismo. Los perros son capaces de experimentar este tipo de sensaciones por ejemplo cuando ve que su propio amo está tratando mejor a otro perro antes que a él.
La prueba de ello es un curioso experimento que llevó a cabo una austríaca, Friederike Range, de la Universidad de Viena. Ya se había estudiado este tipo de sentimientos en otros animales como los chimpancés por ejemplo. Pero esta vez se escogió a los perros para comprobar si ciertamente ellos también pueden llegar a sentir envidia o celos. Este experimento en concreto consistía en una prueba bien sencilla que se realizó a perros bien entrenados. Cuando estos pasaban unos obstáculos, eran recompensados. La cuestión era que a unos se les otorgaba mejores recompensas que a otros. Había recompensas que eran salchichas, mientras que otras eran simples trozos de pan insípidos.
Al parecer, los perros que estaban recibiendo pan como recompensa se negaban a obedecer a la hora de pasar los obstáculos. Pero no sólo fue eso. Cual fue la sorpresa de los que estaban realizando el experimento cuando se dieron cuenta de que estos perros además se estaban mostrando hostiles hacia los otros perros que habían recibido salchichas como premio.
Se corroboraba así lo que muchos dueños ya sospechaban, y es que ciertamente estos animales sienten envidia y actúan de peor forma cuando se dan cuenta que son tratados peor que otros. Si tienes en casa un perro como mascota, sabrás perfectamente a que nos referimos.