Los perros suelen sentirse muy atraídos por los pies de las personas. De hecho, es habitual que muerdan las zapatillas o calcetines. A veces, este interés va más allá y se demuestra a través de otros gestos y hábitos como el hecho de querer sentarse siempre sobre los pies de su dueño o de la persona con la que tenga más vínculo dentro de la familia o del hogar. Pero, ¿por qué lo hace? Varias son las causas que explican este comportamiento.
Apego
Una de las principales razones por las que el perro se sienta siempre en los pies de la persona es por afecto y por apego excesivo, siendo su manera de mostrar que se sienten cómodos y a gusto estando cerca.
No obstante, en otras ocasiones, este gesto lo hacen para mostrar su apoyo. No hay que olvidar que los perros son capaces de detectar el estado de ánimo de las personas por lo que no es raro que se sienten en los pies para poner de manifiesto el vínculo que tienen para mostrar ese apoyo. Esto suele suceder cuando la persona está triste o se percibe que está atravesando un mal momento.
Pero también hay veces que el perro actúa de este modo porque tiene demasiado apego y precisa estar de forma constante vinculada con la persona. Esto, a veces, suele verse como un trastorno, sobre todo, si este comportamiento se acompaña de problemas de ansiedad.
Precisamente, tras esta ansiedad puede haber distintas causas. Una de las más habituales es la separación del perro de la persona, lo que sucede cuando tiene que pasar mucho tiempo solo en el hogar durante el día o la noche. Sentarse sobre los pies es la forma de mostrar que está triste y pedir cariño.
Otras causas
A veces, el hecho de sentarse en los pies responde a otros motivos. Uno de ellos es el miedo ante situaciones desconocidas o bien porque el can se sienta inseguro. En otras ocasiones, es solo una cuestión de querer marcar su territorio y, en otras, sucede por un sentimiento de propiedad de la persona sobre la que se sienta.
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