En más de una ocasión ya hemos hablado de la gran afición que tienen de manera generalizada los gatos por trepar para estar en lo alto. Y esto implica que no solo arañen las cortinas y se suban por ellas, sino que también alcancen armarios de la cocina, librerías del salón, estanterías o cualquier otra altura. Como ya hemos comentado, es un comportamiento innato y que, inicialmente, no debe preocupar, aunque sí que es cierto que es un tanto molesto porque muchas veces los mininos no pueden bajar y es un problema hacer que vuelvan al suelo. Y, ¿qué se puede hacer? La mejor arma es la prevención. Aquí tienes unos consejos para evitar que el gato trepe en casa.
Qué hacer
La mejor arma para evitar que los gatos trepen y que dejen todo arañado es la educación. Esto es importante hacerlo desde pequeños, aunque sí es cierto que en algún momento, siguiendo su instinto, pueden trepar.
Esta educación debe basarse en que el gato aprenda a respetar los muebles y espacios. Para ello, no es bueno ponerle obstáculos para evitar que trepe porque, además, terminará consiguiéndolo. La clave está en facilitarle una serie de elementos que hagan que no trepe.
Entre ellos, por ejemplo, están los rascadores con plataformas elevadas. Estos elementos ayudan al gato a que haga ejercicio y, por lo tanto, satisfacer sus necesidades e instinto natural.
Además, este tipo de artículos también contribuyen a que comprendan que es un lugar exclusivamente para ellos en los que pueden no solo hacer ejercicio, sino descansar en las alturas y desarrollar su capacidad de observación.
La ventaja de estos complementos es que hay diferentes modelos, algunos de los cuales son muy atractivos. Una buena opción es comprar uno que parezca como un tronco o árbol porque el gato de manera instintiva querrá trepar por él.
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