Por mucho que nos cueste aceptarlo, los gatos también se hacen mayores, por lo que tendremos que adaptar sus cuidados a medida que vayan llegando a la vejez, algo que ocurre entre los 7 y los 10 años, aunque es importante tener en cuenta que cada felino envejece a su ritmo.
Cuando entran en la tercera edad, los felinos no solo pierden parte de su olfato, su oído y su capacidad para saborear la comida, sino que comienzan a tener dificultades para ingerir, merman la tolerancia de su sistema inmunológico, reducen su apetito y son menos cuidadosos con su higiene personal, entre otras cosas. Hoy vamos a centrarnos en este último aspecto, ofreciéndote algunos consejos de higiene para los gatos mayores. ¿Te gustaría acompañarnos?
Cepillado
Como te acabamos de comentar, a medida que se van haciendo mayores, los gatos dejan de ser tan cuidadosos con su higiene personal. En parte, esto se debe a que su piel pierde flexibilidad. Por eso, deberemos echarles una mano. Así, lo primero que te recomendamos es que cepilles bien al animal cuando entre en la tercera edad para reducir el riesgo de que se creen bolas de pelo en su intestino, problema del que hablamos el otro día. Lo mejor es que optes por un cepillo suave.
Uñas
Por otro lado, es importante tener en cuenta que los gatos mayores no suelen utilizar los rascadores y postes de arañado tan a menudo como los jóvenes. Por eso, es necesario prestarle más atención al cuidado de sus uñas, cortándoselas cuando sea necesario.
Arenero
Por último, queremos hablarte del arenero, que deberá estar situado en un lugar del todo accesible. Además, es mejor que los bordes de las cajas sean bajos.
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