¿Te has preguntado alguna vez como beben los gatos? El mecanismo que utilizan para ingerir agua no es ni mucho menos sencillo y no tiene nada que ver con el de los perros, que utilizan la lengua colocándola en forma de cuchara invertida. De hecho, detrás de la forma de beber de los gatos hay varias leyes científicas que, incluso, llegan a intrigar a los científicos. Lo que está claro es que el secreto se encuentra en la lengua.
El acto de beber no es tan sencillo para las especies que, a diferencia de los humanos, no pueden cerrar por completo la boca antes de comenzar la succión del líquido, como los perros y los gatos. Ya sabes cómo se las arreglan los canes pero, ¿sabes en que se basa el mecanismo de los felinos?
La fuerza de la gravedad
Según un estudio publicado en la revista “Science Express”, el gato utiliza un interesante mecanismo físico para beber basado en la capacidad de adhesión del agua a su lengua, que juega con el delicado equilibrio existente en las fuerzas de gravedad y la inercia del propio fluido.
Los cálculos del gato
Según cuentan en la revista, los gatos han aprendido a calcular de un modo natural la altura exacta donde la fuerza de gravedad, que empuja el líquido hacia el suelo, se iguala con las fuerzas químicas y físicas que mantienen unidas las moléculas de agua a su lengua mientras beben.
El mecanismo
Así, a la hora de beber, el felino empuja la lengua hacia arriba a gran velocidad, creando una columna de agua que queda adherida a su superficie inferior. El líquido se queda ahí gracias al juego de fuerzas en equilibrio ejercido por la inercia y las atracciones que surgen entre las distintas moléculas de agua y la lengua del gato. Justo en el momento que la fuerza de gravedad supera estas acciones, el gato cierra sus mandíbulas y traga el chorro de agua.