El cachalote es uno de los mamíferos marinos que se puede sumergir a mayor profundidad. Se cree que puede llegar a sumergirse hasta a tres kilómetros y que pueden estar sumergidos durante hora y media, lo que los permite alcanzar profundidades marinas que aun son desconocidas para los hombres. Es en estas profundidades donde se alimenta del calamar gigante y del calamar colosal.
Fue en un cachalote blanco y no en una ballena en quien se inspiró el escritor Helman Melville para escribir su famosa novela Moby Dick.
Su nombre científico es Physeter macrocephalus, y su cerebro es el más grande del reino animal, pudiendo llegar a pesar hasta ocho kilos. Es el único miembro del género Physeter, y una de las tres especies que existen de la familia Physeteridae, que forma con el cachalote pigmeo y cachalote enano.
Los machos pueden llegar a medir más de veinte metros de largo y a pesar más de 40.000 kilos y las hembras hasta los 15 metros y los 14.000 kilos. Una cría recién nacida puede pesar ya una tonelada.
Su cabeza puede medir hasta un tercio del tamaño del cuerpo y en ella se ubica el denominado órgano de Espermaceti, una cavidad que está llena de un aceite blanquecino y que también se puede encontrar en las grasas vascularizadas de las ballenas. No se sabe muy bien cuál es su utilidad. Algunos científicos piensan que, al solidificarse el aceite que contiene al contacto con el agua fría, ayuda al animal a descender mejor, mientras que otros piensan que sirve como ariete en las luchas con otros machos en la época de apareamiento. Otra posibilidad que se baraje es que este órgano ayude a mejorar la ecolocalización.