¿Te has preguntado alguna vez por qué los bebés humanos no caminan a las pocas horas de haber nacido, al igual que hacen otros animales? Desde luego, es sorprendente el nivel de dependencia que tienen los bebés en comparación con las crías de otras especies.
Eso sí, independientemente de cuándo sea, el momento en el que las crías de los animales y los bebés humanos se ponen de pie por primera vez y comienzan a andar es realmente emocionante. Podrás comprobarlo tú mismo en el vídeo que te mostramos al final del artículo.
El esfuerzo merece la pena
En las imágenes que te mostramos a continuación, se puede apreciar el esfuerzo que hacen diferentes animales (girafas, osos polares, potros, rinocerontes…) para ponerse de pie hasta que finalmente lo consiguen y pueden dar sus primeros pasos. Y es que, tal y como dice el vídeo, aunque dar el primer paso es duro, merece la pena.
¿Por qué los bebés no andan al nacer?
Según algunos estudios científicos, los bebés no andan al nacer porque su cerebro no está completamente desarrollado y no es capaz de enviar las señales necesarias al resto del cuerpo para que los bebés caminen. De hecho, los mecanismos neuronales necesarios para caminar aparecen en un momento similar de la gestación en todos los mamíferos, aunque la biomecánica de la marcha es diferente en algunos mamíferos, lo que hace que el tiempo en el que se comienza a andar sea diferente.
Por ejemplo, los plantígrados que, como nosotros, apoyan el pie completo en el suelo, comienzan a caminar más tarde que los animales que no apoyan el talón, como los perros y los gatos. Esto quiere decir que el caminar de los plantígrados es más complejo y necesita de un mayor desarrollo cerebral. ¡Pero esta no es la única explicación! Y es que aunque los humanos recién nacidos tuvieran un desarrollo cerebral superior, carecerían de un sistema musculo-esquelético preparado para caminar.