Para evitar que nuestras mascotas padezcan enfermedades, la mejor prevención es ayudarles a fortalecer su sistema inmunitario, de forma que puedan combatirlas mejor. Aunque es sobre todo en invierno cuando necesitan que sus defensas estén mejor preparadas, será a partir de ahora cuando, realizando los cambios necesarios en su rutina y alimentación, consigamos que nuestro perro o gato se vuelva más resistente ante las enfermedades. Este cuidado debe ser aún mayor si nuestras mascotas son cachorros, perros o gatos mayores o presentan alguna enfermedad crónica.
Lo primero que debemos hacer es cuidar de que su alimentación sea equilibrada, de forma que el animal ingiera los nutrientes necesarios para mantenerse en perfectas condiciones. En el mercado existen piensos que, por su formulación, aportan la cantidad diaria recomendada de todos ellos, pero si por cualquier causa es posible que sufran alguna carencia, deberemos hablar con nuestro veterinario de forma que nos guíe sobre la necesidad o conveniencia de dar algún suplemento dietario a nuestra mascota, como pueden ser ácidos grasos omega 3 y 6, que van a mejorar la producción de glóbulos blancos o incluir algún suplemento vitamínico, sobre todo aquellos que contengan vitaminas B1, B6 y B12, siempre bajo supervisión veterinaria.
Deberemos también eliminar cualquier parásito que pueda tener nuestra mascota, tanto externos, como pueden ser las pulgas, los piojos o las garrapatas o los parásitos intestinales, ya que la presencia de éstos hace que su sistema inmunológico se deprima.
Hacer ejercicio regularmente es imprescindible para mejorar su sistema inmunitario. En el caso de los perros, debemos permitirle correr y pasear a lo largo del día para mantenerse en forma y si somos propietarios de gatos, deberemos jugar con él y hacerle moverse en lugar de pasarse el día dormitando.
Finalmente, es importante no fumar en sitios cerrados donde esté nuestra mascota, ya que el humo perjudicará sus sistema respiratorio.