Es normal que al tener un animal de compañía se tengan ciertas dudas. Por ejemplo, hay un tema que crea mucha confusión: el del uso de los bozales en los perros. En este sentido, lo primero que debes tener en cuenta es que los canes necesitan unas pautas en su educación para aprender a comportarse tanto en casa como en la calle.
Y aunque creas que tu perro tiene una educación exquisita (prácticamente no ladra y es capaz de comportarse perfectamente), legalmente deberás estudiar cuál es la raza de tu mascota para saber si estás obligado a pasearlo con bozal.
Mejor una buena educación
Lo cierto es que son muchos los educadores caninos que están en contra de la utilización del bozal. Estos defienden que es mucho más importante la buena educación del perro que ponerle un parche en la boca que evite los mordiscos y los ladridos.
La ley obliga a los perros de raza peligrosa
Aún así, la ley obliga a poner bozal a todos aquellos perros que son considerados de raza peligrosa, como son el Rottweiler, el Pitbull o el Pastor Alemán en algunas localidades. Por eso, es importante que te informes bien sobre la ley de tu localidad antes de pasear a tu perro.
Funciones del bozal
Los que defienden el uso de los bozales consideran que gracias a él se evita que el can agreda a otras personas o mascotas y, además, se le educa y enseña a no comer cosas del suelo o mordisquear heces de otros perros. Sí, son cosas que también se pueden lograr con una educación lenta y con mucho esfuerzo.
Otros profesionales recomiendan ponerle el bozal al animal cuando se acude al veterinario, ya que muchos canes pueden sentirse temerosos a la hora de enfrentarse a ellos. De esta manera, se puede evitar que la mascota agreda al veterinario y los ladridos durante la espera.