Los guppys son peces amistosos, alegres y con colores brillantes. Poco apoco se han ido haciendo tan populares entre los amantes de los peces que su cría se ha ido incrementado a un ritmo bastante rápido. Si pretendes criar este tipo de peces debes tener en cuenta que no pondrás fin a la reproducción separando a las hembras e los machos, ya que estas son capaces de almacenar el semen.
Aún con la ausencia de machos, las hembras guardan el semen y son capaces de utilizarlo durante los siguientes 3 – 4 meses del primer alumbramiento. Así que imagínate la que se puede liar en tu acuario; de unos cuantos guppys puedes pasar a tener 100 en unos pocos meses. Las crías son muy pequeñas y los adultos tienden a comérselos si no estás atento.
Desde que nacen, debes estar vigilándoles para que no suceda ninguna desgracia. La dieta de los alevines guppys jugará un papel importante en su crecimiento y en su resistencia a las enfermedades. Cuando nacen, las crías tienen la boca pequeña, así que la alimentación por copos, no funcionará. Tendrás que empezar dándoles la comida más pequeña que puedas conseguir. Ve a una tienda especializada y explícales que tipo de peces tienes ya que además, hay comidas especiales que les ayudan a mejorar el color.
Las crías pueden ser alimentadas con una mezcla de alimento seco y alimento vivo. Requieren una dieta que sea rica en proteínas. El alimento seco puede incluir la leche en polvo, materia vegetal, copos, pan o migas de galletas, pasta de yema de huevo, etc., mientras que el alimento vivo puede ser con gusanos, pequeños insectos, camarones y dafnias.