A primera vista el Basset Artesiano Normando nos parece conocido, ya que nos recuerda a su pariente el Basset Hound, en el tamaño, color y apariencia en general. El Basset Artesiano es un eficiente perro de caza, de pequeño tamaño con una figura ligeramente desproporcionada que le da un aire divertido, largo cuerpo y patas cortas pero eso sí; mantiene una mirada que comparte con el Basset Hound que al verlo te enternece.
El origen de los Basset Artesiano no está muy claro, pero algunos expertos lo sitúan en Francia en donde en el siglo XVI era apreciado por sus dotes como perro de caza. Hoy en día lo es en algunos lugares de Inglaterra rural dónde es utilizado para la caza de conejos y otras pequeñas especies. Poco a poco se ha convertido en un apreciado perro de compañía. Su tranquilidad habitual que le hace parecer aburrido, es ideal para que interactúe con los niños, aunque por naturaleza no sea juguetón.
El Artesiano Normando, sin embargo adora su oficio, la caza le atrae irresistiblemente y cuando realiza esas funciones, se muestra hiperactivo y diligente, es podría decirse el perro perfecto para estas funciones ya que por su pequeño tamaño puede corretear por el campo y localizar las piezas de caza rápidamente.
A lo largo de su historia, ha sufrido mutaciones, evidencia de ello es su apariencia de cuerpo alargado y patas cortas que algunos expertos en perros consideran una secuela del raquitismo que la raza padeció en algún momento. Sus orejas son largas y su cuello suele presentar una simpática papada. Es un perro afable y fácil de cuidar.