Es creencia popular que un año de vida en un gato equivale a siete de las personas. Cierto es que los gatitos maduran primero en ese sentido, y hacen más lenta su decadencia, por lo que un año felino equivale al final a unos cuatro nuestros. En cualquier caso un gato es de edad más que madura cuando tiene ocho años.
Como ocurre con las personas, el paso de la edad madura a la vejez es indefinido también en los gatos, y es que depende de factores tales como es el cuidado y la dieta; pero el hecho de que muchos gatos domésticos superen con facilidad los 15 años de vida normal, indica que una gran parte de su vida transcurre en lo que técnicamente se llama vejez.
A esa vejez, no llegan desgraciadamente los gatos abandonados y callejeros de ciudad, y es que viven como promedio tan solamente dos años; sin embargo, los gatos de las colonias silvestres tienen mucha más suerte y pueden llegar a vivir hasta los 10 años. Los más longevos suelen ser los gatos castrados, destacando a los machos los que tienen menos probabilidad de llegar a viejos que las hembras.
Aunque no hay muchos datos concretos sobre la longevidad comparativa de las distintas razas de gatos, se puede decir que cualquier raza de gran consanguinidad, por lo general tiende a ser de corta vida. Si se compara con la mayoría de los animales domésticos pequeños -incluyendo los perros-, en promedio de vida -de 14 a 15 años- los gatos viven más, llegando incluso a aproximarse a la longevidad del caballo.