En más de una ocasión, hemos hablado sobre la importancia de proteger a las mascotas del frío del invierno. Y los gatos no son una excepción porque, aunque habitualmente no salgan de casa, también precisan tener una temperatura idónea en el hogar. Y si no la tienen, los propios mininos son capaces de buscarla. Prueba de ello es Busao, el gato que se ha enamorado de una estufa de la que no se separa en todo el día.
La historia
La historia de Busao se ha hecho viral. Este gato estaba pasando bastante frío este invierno durante el que, en algunos países, se han batido temperaturas récord y en los que mantener un calor adecuado en el hogar está siendo complicado.
Japón es uno de estos países en los que las bajas temperaturas no solo afectan a las personas, sino también a las mascotas como Busao. Un gato que, con el fin de estar calentito y bien abrigado, se ha pegado a una estufa.
Y es literal. Y es que Busao no se separa del calefactor que tiene su dueño. Pero su relación con esta estufa parece mucho más allá a juzgar por las fotografías. En más de una de ellas parece que la está adorando como si fuera una fuente de vida divina, seguramente por la tonalidad de la llama.
Su adoración por esta estufa ha hecho que Busao no se separe de ella ni para dormir a pierna suelta. Es más. En alguna ocasión, se ha llevado algún susto porque se ha quemado los bigotes y también alguna parte de su cuerpo como las patas al querer tocar la estufa y por acercarse tanto a ella.
El secreto de esta relación
La clave de esta relación entre Busao y la estufa puede estar en que el gato era callejero por lo que es evidente que este tipo de aparatos llamen su atención, además de acercarse por el calor.
De momento, esta relación continúa según se puede ver en las fotos que ha publicado su actual dueño en redes sociales como Facebook e Instagram y en plataformas como Youtube. Seguiremos la historia para ver qué sucede cuándo llegue el buen tiempo y haya que apagar la estufa.
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