Los animales, al igual que las personas, son susceptibles a enfermar, especialmente los perros y los gatos. También pueden sufrir muchas molestias que alteran su salud, como nos puede pasar a cualquiera y, de hecho, muchas son muy comunes en nosotros y en ellos. Una de esas enfermedades es la gastritis, una verdadera pesadilla en cualquier momento de tu vida.
Cuando la mucosa gástrica se inflama, hace que aparezca un ardor terrible en el estómago que en muchos casos es verdaderamente insoportable, más aún para un perro o un gato ya que no saben hablar para expresar su dolor y lo que les pasa. En el caso de los perros es una enfermedad muy común, así que conviene tener en cuenta cuáles son los síntomas para poder actuar cuanto antes.
Principales síntomas
Fíjate en si se acuesta con la barriga tocando el suelo pero levantando la parte trasera del cuerpo, eso significa que está intentando que se enfríe la zona donde tiene la gastritis debido a los ardores que sufre. Otra señal clara de esta enfermedad son los vómitos, y es que es un hecho que cuando un perro devuelve es porque algo no va bien, así que mira a ver si es por esto.
Tratamiento
Lo primero que se suele hacer es no darle de comer por un tiempo entre 12 y 48 horas, tiempo que determinará el veterinario. También habrá que reducir la cantidad de agua que bebe y comenzar con una dieta adecuada en raciones pequeñas y frecuentes desde que lo diga el veterinario y hasta que se haya curado. En algunos casos también será necesario un tratamiento con antieméticos, corticosteroides, antibióticos u otros medicamentos que sean recomendables para ello. Si la gastritis es por algún objeto extraño que se haya colado en su estómago, la única solución será la cirugía.